Santo Señalado

oraciones san francisco de asis

Indira Gandhi se refirió a como la \’bella y querida oración de San Francisco\’. Entre los enormes difusores de esta oración fue el pensador, poeta y activista de la NO crueldad,Giuseppe Lanza del Vasto. Hay cerca de 100 ediciones distintas en francés del artículo de la oración, y considerablemente más versiones en inglés.

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San Juan Damasceno, Doctor De La Iglesia

Esta oración es el día de hoy una de las devociones más populares en el cristianismo, reconocida como una síntesis —hasta el presente anónima— del ideario vivido por el «beato de Asís». Con todo, la oración fue objeto de análisis y predicación por personalidades contemporáneas de diferente extracción, y fue integrada en el programa de \’los doce pasos\’ de recuperación del alcoholismo por la parte de Alcohólicos Anónimos. Esta oración es el día de hoy entre las devociones más populares en el cristianismo, un mensaje de paz y de esperanza que cobró fuerza a lo largo de la Primera Guerra Mundial. Tras la oración del Padre Nuestro, la oración de San Francisco de Asís se encuentra dentro de las más conocidas por la sencillez, calidez y también intenciones que transmite su mensaje. Hablamos de una oración famosa y habitual, y muy considerada aun por aquellos que no prosiguen ninguna religión.

En este sitio solicitó san Francisco de Asís a Jesús, a través de la Reina de los Ángeles, la denominada «indulgencia de la Porciúncula», que el Papa Honorio III confirmó el 2 de agosto de 1216. Hoy se festeja la festividad de Nuestra Señora de los Ángeles, una fiesta vinculada a la orden franciscana, que evoca el atractivo femenino de esta congregación establecida por san Francisco de Asís. Transporta directamente a la pureza de los orígenes de esta fundación del beato italiano que tiene a María como Madre y santa Clara como hermana. La conciencia viva de ser de Dios es algo que nos debe mover a sentir cotidianamente su presencia. O sea lo que sintió en su vida santa Clara —al igual que san Francisco, con el que le unía una hermosa amistad—. misma en alguno de sus escritos manifestaba que la felicidad se consigue por la amistad con Dios; y desde esa amistad uno entiende la dulzura de Dios, que anega toda el alma, morada y aposento de Dios. San Francisco de Asís, del que festejamos el día de hoy su festividad, es uno de mis santurrones referentes por su vida, por su espiritualidad, por como sus movimientos evocan la obra de Dios, por cómo sabía dejarse conseguir el poder de Cristo hasta el punto de que el Señor le premió en su cuerpo con sus estigmas del padecimiento.

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Pero no es mi intención adentrarme en este artículo en un análisis de esa mitología. Dios, haz de mí un instrumento de paz, que donde exista odio, ponga el amor, donde existan enfrentamientos, ponga el perdón, donde exista la discordia, ponga la unión, donde exista desesperación, coloque esperanza y donde haya duda, yo ponga la fe. Oh Señor, que no busque tanto ser consolado, cuanto consolar, ser comprendido, cuanto comprender, ser amado, cuanto amar. Pues es dándose como se recibe, es olvidándose de sí como uno está a sí mismo, es disculpando, como se es perdonado, es muriendo como se resucita a la vida eterna. En primer lugar por el obsequio que supone dar la eternidad a un individuo cercano y pues me hace consciente que al reino de Dios sólo podré llegar por esa íntima renovación de mi corazón, de mi predisposición a la santidad, a la luz de la santidad y caridad de Dios. Me permite entender que nacido con la mancha del pecado Cristo me ha lavado en el bautismo y que debido a mi patología, mi pobreza y mi debilidad su amor me socorre otorgándome su indulgencia a través de su santa Madre. San Francisco lo logró; alcanzó un nivel supremo de paz interior, de vida de oración, de renuncias valientes, de alegría de corazón, de abnegación absoluta.

San Francisco es un testigo vivo de de qué forma crecer en nuestra fe, en nuestra forma de entender la vida cristiana y cómo reforzar en la privacidad con Cristo. Con este compendio de oraciones podrás dirigirte a este santo de forma correcta para que cumpla tus peticiones. Antes de despedirnos, te recordamos que, según el Calendario Litúrgico oficial, la fecha para venerar a san Francisco son todos y cada uno de los 4 de octubre. El francés Christian Renoux fue responsable de rastrear y conocer los verdaderos orígenes de la oración.​ Renoux fue miembro de la Escuela francesa de Roma ( ), doctor en Historia moderna en la Facultad de París I , licenciado en Teología católica en la Facultad de Estrasburgo. Desde 1998, Renoux fue instructor asociado de Historia actualizada en la Universidad de Orleans, donde asimismo enseñó Historia de la religión y también Historia de la no violencia. Es de ver que la investigación de Renoux fue publicada en una editorial de extracción franciscana, que avaló de esta forma implícitamente los aportes de este estudioso y pacifista francés. Por otro lado, el propio «Directorio Franciscano» no presenta la oración atribuyendo su autoría al santurrón de Asís, sino que la titula «Oración franciscana por la paz»,​ así llamada por reflejar el espíritu de esa congregación.

Oh, divino Profesor, concédeme que no busque tanto para ser consolado como para consolar; para ser entendido, para comprender; ser amado, como amar; porque es dando lo que nos llega, es en el perdón que somos perdonados, y es al morir que nacemos a la vida eterna. Se dicen las pretenciones de la novena y se rezan 5 padrenuestros, avemarías y glorias en honor de las cinco llagas de San Francisco. Gloriosísimo Asegurador y Padre mío, San Francisco, a ti acudo, suplicando tu vigorosa intercesión, para entender el cariño que Dios Nuestro Señor te manifestó al atormentar vuestra carne y vuestro espíritu. Tus llagas son cinco focos de caridad divina; cinco lenguas que me recuerdan las misericordias de Jesucristo; cinco fuentes de felicidad divinos que el Creador te confió para que las distribuyas entre tus devotos. , pide por mí a Jesús crucificado una chispa del fuego que ardía en tu alma aquel día dichoso en que recibiste la seráfica crucifixión, para que, recordando tus privilegios sobrenaturales, imite tus ejemplos y siga tus enseñanzas, viviendo y muriendo, amando a Dios sobre todas y cada una de las cosas. Estas oraciones concreto no son dirigidas específicamente para la salud de personas, sino asimismo para animales, ya que San Francisco de Asís es el patrón y protector de los animales. Así mismo, si la mascota del hogar muestra ciertas carencias en el campo de la salud, estas son las oraciones indicadas para proveer a los animales la tranquilidad que necesitan a fin de que la enfermedad cese.

La oración de San Francisco de Asís, también llamada Oración simple, es un poema escrito probablemente a inicios del siglo XX pero atribuido hasta fines de ese siglo al fraile italiano Francisco de Agarráis ( ). Indagaciones posteriores realizadas por el académico e historiador francés Christian Renoux permitieron entrever los verdaderos orígenes de la oración, cuya autoría sigue siendo dudosa. Fue publicada en una gaceta francesa llamada La Clochette, sin suscripción y con el título \’Hermosa oración para hacer a lo largo de la misa\’.

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Su ejemplo y el de varios franciscanos me inspiran en mi vida personal y en mi vida de oración. En la vida de san Francisco la oración y la meditación son 2 pilares esenciales. Todo en san Francisco es espíritu de oración, alabanza y devoción, y amor ferviente y descuidado a Dios y a los que le rodeaban. A excepción de la Oración frente al Crucifijo de san Damián y la Carta a toda la orden, todas las demás oraciones de san Francisco exudan el perfume de la alabanza, de la acción de gracias, de la caridad, de la fe, de la esperanza y la devoción. Orar para vaciarse de sí y, en la humildad, llenarse del Señor.

• Como es ya sabido, este Franciscano tan habitual entregado a Dios, que amo la naturaleza, abogaba por los más necesitados sobre todo por los pequeños, a quienes tenía una oración para soliciar por su bienestar.
• Indagaciones posteriores realizadas por el académico y también historiador francés Christian Renoux dejaron entrever los verdaderos orígenes de la oración, cuya autoría continúa siendo dudosa.

fue realmente un ejemplo auténtico de persona convertida en instrumento de paz y de amor. ¿De qué manera puedo yo, hombre del siglo XXI, ser instrumento de paz? Pacificando mi corazón, serenando los ímpetus de mi vida, integrando mis deseos con los deseos de Dios, empapando de oración todos de mis actos.

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